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Debo confesar que he tenido una picazĂłn Ăşltimamente.
Los lectores habituales de este blog pueden recordar que hace exactamente un año, yo estaba en la República Dominicana en un viaje misionero.
Fue un increĂble, una experiencia maravillosa, que cambia la vida y me pica volver.
El picor incluso a veces raya en “dolor” a veces.
Me aflige cuando estoy cocinando, (Los granos dominicanos básicos y plato de arroz es deliciosa, casi al punto de la adicciĂłn.), Cuando estoy leyendo mi Biblia, y aĂşn hoy en dĂa como lo estaba cargando leña en el cubo del tractor. Se cuela en mĂ incluso en la iglesia cuando me dan ganas de gritar “GLORIA DIOS!” Y “ALELUYA!” Durante una canciĂłn o en medio del sermĂłn.
La cosa es que el picor es totalmente egoĂsta.
Cuando usted va en un viaje de misiĂłn, la gente te pregunta, “ÂżQuĂ© vas a hacer allĂ?”
Como si, porque somos cristianos americanos, somos de alguna manera más espiritual, o más inteligente, o de alguna manera mejor que estas personas pobres que viven en este paĂs “tercer mundo”.
Eso es un montĂłn de tonterĂas.
Por lo que vi, la RepĂşblica Dominicana no “necesita” Dan Jones en ningĂşn sentido de la palabra.
Los dominicanos son absolutamente capaces de hacer cualquier cosa que tienen que hacer sin mi ayuda en absoluto. Ellos saben cĂłmo hacer las cosas que estoy desorientado sobre. Yo estaba absolutamente humillado cuando tratĂ© de “ayudar” a romper un poco de concreto para nivelar un piso. HabĂa una niña allĂ cerca de cuatro pies de altura, que era mucho mejor en esa tarea que yo.
Y en cuanto a su espiritualidad …
El servicio de la iglesia que asistĂ en la Iglesia Altar de Jehova (Iglesia del Altar de Dios) en Sabana Perdida constaba de tres horas de genuina, sincera alabanza y adoraciĂłn. Es una buena cosa que no hay vidrieras en las ventanas, ya que el sonido de la alabanza probablemente recitar el cristal a la derecha de los marcos. Y, no hay necesidad de una campana de la iglesia porque cuando alaban a Dios, todo el barrio lo sabe.
SĂ, es ruidoso, pero eso no es la parte más sensible de un servicio de adoraciĂłn Dominicana.
La parte más notable es que el EspĂritu Santo no es sĂłlo presente – el EspĂritu Santo está en llamas allĂ.
Usted puede sentirlo. Es un ardor amoroso, agradecido, alegrĂa increĂble desenfrenada.
Y el EspĂritu Santo es notablemente más presente en las personas.
Incluso con la barrera del idioma, incluso trabajando a travĂ©s de un intĂ©rprete (Gracias y que Dios los bendiga, Luis Felipe y HĂ©ctor y Sor.) PodĂa sentir que todo estaba hecho con amor. (Con amor.)
Ciertamente, la RepĂşblica Dominicana no es perfecto. Es absolutamente es parte de este mundo roto. Desde luego, no todos los dominicanos están tan llenos del EspĂritu Santo como los que conocĂ. Tienen delincuentes y drogadictos y asesinatos, tambiĂ©n.
Tienen problemas con la corrupciĂłn en su gobierno, con la contaminaciĂłn, con la seguridad del suministro de agua, con la entrega confiable de la electricidad, y sin duda con la pobreza.
El promedio Dominicana vive en alrededor de $ 300 por mes, lo cual está por debajo del nivel de pobreza.
PermĂtanme decir que de otra manera.
El promedio Dominicana subsiste con menos de lo necesario para subsistir. Ellos son capaces de sobrevivir sĂłlo porque las familias se aman y se apoyan mutuamente.
AsĂ que lo que no tienen es las cosas materiales que damos por sentado.
Asimismo, no tienen millones de bebĂ©s asesinados en el altar del aborto. No tienen su gobierno ordenando que el matrimonio gay es la ley de las panaderĂas de la tierra o de los jueces multar y ponerlos fuera del negocio porque se negaron a hacer un pastel para una boda gay. (Aunque hay que señalar que el embajador de Estados Unidos a la RepĂşblica Dominicana acoge abiertamente eventos en nuestra Embajada con su “marido”.) Y no tienen un abuelo de 66 años de edad a bolsa con el anuncio de que ahora es una mujer.
En realidad, cuanto más pienso en ello, más me convenzo de que deben estar enviando misioneros a los Estados Unidos. La RepĂşblica Dominicana no tiene necesidad de ser evangelizada – somos.
AsĂ que, sĂ, mi ganas de reunirse con los hermanos (hermanos y hermanas) es totalmente egoĂsta porque me dieron mucho más de lo que podĂa posiblemente darles. SĂ, deseo estar en un pueblo donde el EspĂritu Santo arde como un reflector millones poder en este mundo oscuro oscuro y canta a la gloria de Dios en la parte superior de sus pulmones.
El problema es que todo lo que tengo que ofrecer ellos es trapos de inmundicia por comparaciĂłn.
Y, cuando pienso en eso, dos cosas se me ocurren:
1. Eso es todo lo que tengo para ofrecer a JesĂşs.
2. No es su trabajo para evangelizar el lugar donde vivo. Es mĂo.
Elogio de hoy
Dios es testigo de cuánto los quiero a todos vosotros con el entrañable amor de Cristo JesĂşs. Y esta es mi oraciĂłn: que vuestro amor abunde más y más en ciencia y en todo conocimiento, para que puedan ser capaces de discernir lo que es mejor, y sean puros e irreprochables para el dĂa de Cristo, llenos del fruto de justicia que viene a travĂ©s de Jesucristo, para gloria y alabanza de Dios. (Filipenses 1: 8-11 NVI)
Thanks Brother Dan.I agree the church in the Dominican was such an challenging on fire example. Aleluya!
Thank you, Brother Paul. GLORIA A DIOS!